FEBRERO 2017: LA BIOQUIMICA DEL AMOR
Por Jaime Santillana y Julia Salinas de Santillana
(Ing. Químicos (UNI), M.S. in Ch.E. (U - Wisconsin Madison, U - Ilinois Urbana Champaigne)
www.ssecoconsulting.co
INTRODUCCION
Los autores llevan casados más de 33 años y a pesar de haberse dedicado por décadas a la enseñanza de la ingeniería química, conocen más de procesos que de la bioquímica del amor, por lo que el presente post estará basado en lo fundamental en una traducción libre del post “The Biochemistry of Love, Orgasms and Partnership” publicado en internet en http://bodyberries.com/the-biochemistry-of-love-orgasms-partnership-oxytocin/. La autora de la página web y del Post es la Dra. Isabella Tausz quien fundó bodyberries en el 2012.
Se puede empezar por mostrar afirmaciones más o menos cínicas sobre el amor
Los autores llevan casados más de 33 años y a pesar de haberse dedicado por décadas a la enseñanza de la ingeniería química, conocen más de procesos que de la bioquímica del amor, por lo que el presente post estará basado en lo fundamental en una traducción libre del post “The Biochemistry of Love, Orgasms and Partnership” publicado en internet en http://bodyberries.com/the-biochemistry-of-love-orgasms-partnership-oxytocin/. La autora de la página web y del Post es la Dra. Isabella Tausz quien fundó bodyberries en el 2012.
Se puede empezar por mostrar afirmaciones más o menos cínicas sobre el amor
Existe una posición aún más cínica y que obviamente los autores no comparten, pero igual se expone (aunque se prefiere no traducirlo por no estar de acuerdo con la afirmación):
Los autores prefieren un acercamiento al tema expresado en las siguientes dos caricaturas:
EL AMOR Y LA QUIMICA
El National Geographic fue la primera revista de alcance masivo que puso en portada la teoría que el amor es una reacción química en el especial por el Día de San Valentín de febrero de 2006 (se muestra abajo). En los mencionados números se mostraban investigaciones sobre la química del cerebro involucrado en las diversas etapas de transición del amor romántico.
El National Geographic fue la primera revista de alcance masivo que puso en portada la teoría que el amor es una reacción química en el especial por el Día de San Valentín de febrero de 2006 (se muestra abajo). En los mencionados números se mostraban investigaciones sobre la química del cerebro involucrado en las diversas etapas de transición del amor romántico.
Aquí se prefiere un enfoque menos riguroso y se emplearán fuentes de la web (posts en dos páginas web)
Así en post “Love The Chemical Reaction” (ver http://www.eoht.info/page/Love+the+chemical+reaction) se afirma que el amor puede ser entendido como un proceso en el que dos personas se encuentran y se "enamoran" mediante una reacción química que sería mejor denominado mediante una "reacción química humana".
La concepción del amor como reacción química es una visión de la vida que se ha desarrollado en los últimos doscientos años, que se cree empezó con la publicación de la novela de 1809, Afinidades Electivas.
En términos modernos, el debate continúa, con los que desde el punto de vista filosófico consideran que el amor es algo más allá del alcance del análisis científico y los del lado práctico o fáctico considerando que el amor es un proceso químico.
En el año 1959, se desarrolló la teoría de las feromonas sobre la atracción de la pareja; ese año se sintetizó el bombykol (por el químico alemán Adolf Butenandt), este es un producto químico lanzado por el gusano de seda femenino para atraer compañeros.
En 1976 se desarrolla la teoría de la endorfina sobre el amor (heroína endógena).
En 1980 se desarrolla la teoría del amor del chocolate de 1980 (teoría PEA), luego en los años 90 se desarrolla la teoría de la oxitocina del amor (la explicación del "abrazo químico" para el apego de la vinculación de los pares).
En resumen estas teorías se pueden expresar según la siguiente ecuación:
Así en post “Love The Chemical Reaction” (ver http://www.eoht.info/page/Love+the+chemical+reaction) se afirma que el amor puede ser entendido como un proceso en el que dos personas se encuentran y se "enamoran" mediante una reacción química que sería mejor denominado mediante una "reacción química humana".
La concepción del amor como reacción química es una visión de la vida que se ha desarrollado en los últimos doscientos años, que se cree empezó con la publicación de la novela de 1809, Afinidades Electivas.
En términos modernos, el debate continúa, con los que desde el punto de vista filosófico consideran que el amor es algo más allá del alcance del análisis científico y los del lado práctico o fáctico considerando que el amor es un proceso químico.
En el año 1959, se desarrolló la teoría de las feromonas sobre la atracción de la pareja; ese año se sintetizó el bombykol (por el químico alemán Adolf Butenandt), este es un producto químico lanzado por el gusano de seda femenino para atraer compañeros.
En 1976 se desarrolla la teoría de la endorfina sobre el amor (heroína endógena).
En 1980 se desarrolla la teoría del amor del chocolate de 1980 (teoría PEA), luego en los años 90 se desarrolla la teoría de la oxitocina del amor (la explicación del "abrazo químico" para el apego de la vinculación de los pares).
En resumen estas teorías se pueden expresar según la siguiente ecuación:
Nota.- Una ecuación es una de las formas en que se puede expresar un modelo matemático.A su vez un modelo matemático es una herramienta de los ingenieros químicos (y de otros ingenierías) para tratar de representar la realidad. Todo modelo matemático es una idealización de la realidad con limitaciones para representarla.
Una ecuación sobre el amor pudiera ser:
Una ecuación sobre el amor pudiera ser:
Que se interpreta en palabras tú y yo a la potencia del infinito es igual al amor.
BIOQUIMICA DEL AMOR
En realidad las teorías químicas del amor son bioquímicas por lo que puede pasar a la definición del amor de la Dra. Tausz.
Ella afirma que la fórmula para el amor es la siguiente:
BIOQUIMICA DEL AMOR
En realidad las teorías químicas del amor son bioquímicas por lo que puede pasar a la definición del amor de la Dra. Tausz.
Ella afirma que la fórmula para el amor es la siguiente:
Según la Dra. Tausz algunos científicos creen que las feromonas humanas, sustancias químicas inodoras y que son señales sensuales detectadas por un órgano en nuestra nariz podrían ser la clave para elegir un amante adecuado.
Las feromonas ya están bien comprendidas en otros mamíferos, especialmente los roedores, que cuando eligen un compañero, evitan parejas con un sistema inmunológico demasiado similar al suyo propio, para que sus crías puedan luchar contra una gama más amplia de infecciones. Algunas series de pruebas con humanos (basadas en oler camisetas sudadas) parecieran indicar que esto también ocurre con los humanos.
Según esta lógica el amor sólo es posible con una bioquímica saludable, y además deben haber otras hormonas y neurotransmisores y una producción adecuada de dopamina, oxitocina y vasopresina.
Así, mientras la dopamina es responsable de los sentimientos de excitación en el amor, la oxitocina es clave para la relajante experiencia de apego y la vasopresina es clave para desarrollar la lealtad.
El orgasmo sexual, logrado dentro de una relación amorosa, otorga uno de los momentos máximos a hombres y mujeres.
Se ha propuesto un modelo de enamoramiento en tres etapas, cada una con un conjunto diferente de nuestras propias hormonas y neurotransmisores.
Etapa 1: Lujuria impulsada por el estrógeno y la testosterona.
La lujuria, que es un anhelo de lograr una gratificación sexual, es impulsado por nuestras hormonas sexuales, el estrógeno y la testosterona (por cierto, la testosterona también juega un papel importante en el deseo sexual de las mujeres). Estas hormonas hacen que uno(a) salga buscando a esa persona especial.
Etapa 2: Atracción - Amor romántico, impulsado por una dopamina y noradrenalina – Alto.
La atracción, o el amor romántico son impulsados por la dopamina y la noradrenalina (norepinefrina). En esta fase del amor apenas se puede pensar en otra cosa, la piel se puede ruborizar y las palmas de las manos pueden sudar; se puede llegar a perder el apetito, se necesita menos sueño, se puede pasar horas soñando despierto y experimentando un deseo intenso por nuestro compañero(a) de amor, junto con la euforia cuando las cosas van bien y los bajos terribles cuando no lo son.
La dopamina es nuestro "producto químico del placer", produciendo una sensación de felicidad. La noradrenalina produce la alegría en el corazón y la emoción.
Cuando hay atracción por alguien, podría ser porque inconscientemente nos gustan sus genes, tal como se perciben por el olfato, lenguaje corporal, tono de voz y aspecto. Sería bueno emparejarse con los mejores genes posibles, asegurando futuros niños sanos.
El amor romántico se favorece si se mantienen niveles altos de Dopamina y Noradrenalina. No se trata simplemente de una emoción que se experimenta cuando nos encontramos con una persona adecuada - es más un impulso, un sistema de motivación y parte del sistema de recompensa del cerebro. Es una necesidad que obliga a buscar una pareja amorosa específica, mientras que la corteza pre-frontal está reuniendo datos, poniendo información en patrones, haciendo estrategias y monitoreando el progreso hacia el mayor premio de la vida: el verdadero amor.
El amor romántico es un deseo más fuerte que el sexo.
El amor puede lastimar ya que los adictos al amor son adictos al amor "alto" necesitan de la dopamina y la noradrenalina; pero debido a que el cuerpo acumula una tolerancia a estos productos químicos, comienza a tomar más y más para darles ese sentimiento de amor "alto" y pasan por una relación tras otra, tratando de conseguir su solución.
El amor romántico es un impulso muy fuerte; sin embargo, no se puede permanecer en esta etapa para siempre, de lo contrario nunca se haría ningún trabajo y se moriría de agotamiento sexual.
Los sentimientos de amor apasionado pierden naturalmente su fuerza con el tiempo. Los químicos responsables de esa sensación amorosa (adrenalina, dopamina, noradrenalina, feniletilamina, etc.) disminuyen y se analiza al amante de forma racional, en lugar de hacerlo a través de las hormonas cegadoras de la pasión y el amor apasionado. En esta etapa, la relación es lo suficientemente fuerte como para soportar, o la relación termina.
Si la relación puede avanzar, otras sustancias químicas entran en acción y la relación pasa a la etapa 3 - el amor apasionado se desvanece y el apego crece.
Etapa 3: Acoplamiento impulsado por la oxitocina y la vasopresina.-
En el amor romántico, cuando dos personas se abrazan, tocan y tienen relaciones sexuales, se libera la oxitocina, que comienza a crear un vínculo emocional - cuanto más abrazos y sexo, mayor es el vínculo.
La oxitocina evoca sentimientos de satisfacción, reducción en ansiedad y sentimiento de calma y seguridad alrededor del compañero(a), llevando gradualmente al apego - un vínculo que mantiene a las parejas juntas, dándoles el deseo de permanecer fieles y protegerse mutuamente.
La oxitocina es 'la hormona del abrazo', y está implicada en el reconocimiento social, la formación de la confianza entre la gente, la generosidad y la capacidad de mantener relaciones interpersonales sanas.
Los hombres también producen algo de oxitocina durante las relaciones sexuales, pero la respuesta a la oxitocina es potenciada por el estrógeno, por lo que las mujeres tienden a tener reacciones más fuertes a la oxitocina.
La oxitocina también se asocia con el vínculo madre / hijo, con las contracciones uterinas durante el trabajo de parto y el reflejo de "let down" necesario para la lactancia. La oxitocina puede hacer que una mujer se olvide, disminuya su capacidad de pensar racionalmente y puede causar un apego emocional muy increíblemente fuerte con el hombre con el que está.
Las endorfinas, los analgésicos naturales del cuerpo, también juegan un papel clave en las relaciones a largo plazo; se liberan durante el sexo, el contacto físico y el ejercicio y producen una sensación general de bienestar, incluyendo sentirse calmado, pacífico y seguro; la excitación del sexo se atribuye en parte a las endorfinas.
A medida que madura una relación humana, se liberan menos endorfinas, pero si la relación sexual está bien unida, la respuesta de oxitocina mantiene la excitación a pesar de que se liberen pocas endorfinas; esto mantiene la excitación presente entre las parejas.
El dolor emocional hace que nuestros cuerpos produzcan un nivel elevado de endorfinas, que a su vez reduce el nivel de oxitocina. Por lo tanto, el fracaso en una relación conduce al dolor, que a su vez ocasiona que se eleven las endorfinas elevadas, lo que ocasiona un nivel de oxitocina más baja. Muchos en este creciente estado de dolor emocional y de niveles bajos de oxitocina buscan el sexo como un sustituto del amor; esto inevitablemente conduce a otra relación fallida, y por lo tanto, el ciclo continúa.
La falta de oxitocina puede causar serias barreras emocionales y problemas de apego.
Finalmente se tiene la vasopresina, llamada la molécula de la monogamia. La vasopresina se produce en el cerebro, tanto por hombres como por mujeres. Sin embargo, la hormona masculina testosterona mejora el efecto de la vasopresina, por lo que los hombres experimentan efectos más fuertes.
La vasopresina entra en acción después de la actividad sexual, y su impacto es aumentar el sentido de responsabilidad en el hombre. Cuando el nivel de vasopresina de un hombre es suficiente, crea el deseo de permanecer con su mujer, inspira un sentido protector y lo impulsa a proteger su territorio y su descendencia.
Aunque los hombres pueden tener el deseo de tener relaciones sexuales con múltiples mujeres, la vasopresina ayuda a contrarrestar esta tendencia. Esta provoca que los hombres tengan celos hacia una mujer con la que ha sido sexualmente activo, y también le hace ser leal.
Conclusión del modelo bioquímico del amor
Las 3 etapas del amor y los sistemas hormonales están conectados.
Así, la testosterona puede iniciar a los dos neurotransmisores del amor mientras un orgasmo puede elevar las hormonas de apego, por lo que no se debiera dormir con alguien con quien que se quiere enamorar.
La falta de oxitocina o receptores de vasopresina en el cerebro podría ser responsable del aumento mundial de los solteros.
La incapacidad de secretar oxitocina y sentir empatía está relacionada con la sociopatía, la psicopatía, el narcisismo, el egoísmo y manipulación general.
A medida que los científicos comprenden la química del amor cada vez más, las drogas para manipular el proceso pudieran estar cerca.
Si existiera una droga para el amor y si esta pudiera realmente ayudar a la vida amorosa de alguien sigue siendo una pregunta abierta.
Mientras tanto concluye la Dra Tausz si todavía alguien está buscando a esa persona especial, existe una guía simple sobre cómo enamorarse:
1. Encuentre un extraño(a) completo(a).
2. Revelen unos a otros detalles íntimos sobre sus vidas durante media hora.
3. Luego, mírense profundamente en los ojos del otro sin hablar durante cuatro minutos.
Suerte en el amor y feliz día de San Valentín
COMENTARIO FINAL
Una opinión final de los autores. Es su entendimiento que la siguiente ecuación representa un mejor modelo matemático para el amor (especialmente si hay uno o más ingenieros involucrados).
Las feromonas ya están bien comprendidas en otros mamíferos, especialmente los roedores, que cuando eligen un compañero, evitan parejas con un sistema inmunológico demasiado similar al suyo propio, para que sus crías puedan luchar contra una gama más amplia de infecciones. Algunas series de pruebas con humanos (basadas en oler camisetas sudadas) parecieran indicar que esto también ocurre con los humanos.
Según esta lógica el amor sólo es posible con una bioquímica saludable, y además deben haber otras hormonas y neurotransmisores y una producción adecuada de dopamina, oxitocina y vasopresina.
Así, mientras la dopamina es responsable de los sentimientos de excitación en el amor, la oxitocina es clave para la relajante experiencia de apego y la vasopresina es clave para desarrollar la lealtad.
El orgasmo sexual, logrado dentro de una relación amorosa, otorga uno de los momentos máximos a hombres y mujeres.
Se ha propuesto un modelo de enamoramiento en tres etapas, cada una con un conjunto diferente de nuestras propias hormonas y neurotransmisores.
Etapa 1: Lujuria impulsada por el estrógeno y la testosterona.
La lujuria, que es un anhelo de lograr una gratificación sexual, es impulsado por nuestras hormonas sexuales, el estrógeno y la testosterona (por cierto, la testosterona también juega un papel importante en el deseo sexual de las mujeres). Estas hormonas hacen que uno(a) salga buscando a esa persona especial.
Etapa 2: Atracción - Amor romántico, impulsado por una dopamina y noradrenalina – Alto.
La atracción, o el amor romántico son impulsados por la dopamina y la noradrenalina (norepinefrina). En esta fase del amor apenas se puede pensar en otra cosa, la piel se puede ruborizar y las palmas de las manos pueden sudar; se puede llegar a perder el apetito, se necesita menos sueño, se puede pasar horas soñando despierto y experimentando un deseo intenso por nuestro compañero(a) de amor, junto con la euforia cuando las cosas van bien y los bajos terribles cuando no lo son.
La dopamina es nuestro "producto químico del placer", produciendo una sensación de felicidad. La noradrenalina produce la alegría en el corazón y la emoción.
Cuando hay atracción por alguien, podría ser porque inconscientemente nos gustan sus genes, tal como se perciben por el olfato, lenguaje corporal, tono de voz y aspecto. Sería bueno emparejarse con los mejores genes posibles, asegurando futuros niños sanos.
El amor romántico se favorece si se mantienen niveles altos de Dopamina y Noradrenalina. No se trata simplemente de una emoción que se experimenta cuando nos encontramos con una persona adecuada - es más un impulso, un sistema de motivación y parte del sistema de recompensa del cerebro. Es una necesidad que obliga a buscar una pareja amorosa específica, mientras que la corteza pre-frontal está reuniendo datos, poniendo información en patrones, haciendo estrategias y monitoreando el progreso hacia el mayor premio de la vida: el verdadero amor.
El amor romántico es un deseo más fuerte que el sexo.
El amor puede lastimar ya que los adictos al amor son adictos al amor "alto" necesitan de la dopamina y la noradrenalina; pero debido a que el cuerpo acumula una tolerancia a estos productos químicos, comienza a tomar más y más para darles ese sentimiento de amor "alto" y pasan por una relación tras otra, tratando de conseguir su solución.
El amor romántico es un impulso muy fuerte; sin embargo, no se puede permanecer en esta etapa para siempre, de lo contrario nunca se haría ningún trabajo y se moriría de agotamiento sexual.
Los sentimientos de amor apasionado pierden naturalmente su fuerza con el tiempo. Los químicos responsables de esa sensación amorosa (adrenalina, dopamina, noradrenalina, feniletilamina, etc.) disminuyen y se analiza al amante de forma racional, en lugar de hacerlo a través de las hormonas cegadoras de la pasión y el amor apasionado. En esta etapa, la relación es lo suficientemente fuerte como para soportar, o la relación termina.
Si la relación puede avanzar, otras sustancias químicas entran en acción y la relación pasa a la etapa 3 - el amor apasionado se desvanece y el apego crece.
Etapa 3: Acoplamiento impulsado por la oxitocina y la vasopresina.-
En el amor romántico, cuando dos personas se abrazan, tocan y tienen relaciones sexuales, se libera la oxitocina, que comienza a crear un vínculo emocional - cuanto más abrazos y sexo, mayor es el vínculo.
La oxitocina evoca sentimientos de satisfacción, reducción en ansiedad y sentimiento de calma y seguridad alrededor del compañero(a), llevando gradualmente al apego - un vínculo que mantiene a las parejas juntas, dándoles el deseo de permanecer fieles y protegerse mutuamente.
La oxitocina es 'la hormona del abrazo', y está implicada en el reconocimiento social, la formación de la confianza entre la gente, la generosidad y la capacidad de mantener relaciones interpersonales sanas.
Los hombres también producen algo de oxitocina durante las relaciones sexuales, pero la respuesta a la oxitocina es potenciada por el estrógeno, por lo que las mujeres tienden a tener reacciones más fuertes a la oxitocina.
La oxitocina también se asocia con el vínculo madre / hijo, con las contracciones uterinas durante el trabajo de parto y el reflejo de "let down" necesario para la lactancia. La oxitocina puede hacer que una mujer se olvide, disminuya su capacidad de pensar racionalmente y puede causar un apego emocional muy increíblemente fuerte con el hombre con el que está.
Las endorfinas, los analgésicos naturales del cuerpo, también juegan un papel clave en las relaciones a largo plazo; se liberan durante el sexo, el contacto físico y el ejercicio y producen una sensación general de bienestar, incluyendo sentirse calmado, pacífico y seguro; la excitación del sexo se atribuye en parte a las endorfinas.
A medida que madura una relación humana, se liberan menos endorfinas, pero si la relación sexual está bien unida, la respuesta de oxitocina mantiene la excitación a pesar de que se liberen pocas endorfinas; esto mantiene la excitación presente entre las parejas.
El dolor emocional hace que nuestros cuerpos produzcan un nivel elevado de endorfinas, que a su vez reduce el nivel de oxitocina. Por lo tanto, el fracaso en una relación conduce al dolor, que a su vez ocasiona que se eleven las endorfinas elevadas, lo que ocasiona un nivel de oxitocina más baja. Muchos en este creciente estado de dolor emocional y de niveles bajos de oxitocina buscan el sexo como un sustituto del amor; esto inevitablemente conduce a otra relación fallida, y por lo tanto, el ciclo continúa.
La falta de oxitocina puede causar serias barreras emocionales y problemas de apego.
Finalmente se tiene la vasopresina, llamada la molécula de la monogamia. La vasopresina se produce en el cerebro, tanto por hombres como por mujeres. Sin embargo, la hormona masculina testosterona mejora el efecto de la vasopresina, por lo que los hombres experimentan efectos más fuertes.
La vasopresina entra en acción después de la actividad sexual, y su impacto es aumentar el sentido de responsabilidad en el hombre. Cuando el nivel de vasopresina de un hombre es suficiente, crea el deseo de permanecer con su mujer, inspira un sentido protector y lo impulsa a proteger su territorio y su descendencia.
Aunque los hombres pueden tener el deseo de tener relaciones sexuales con múltiples mujeres, la vasopresina ayuda a contrarrestar esta tendencia. Esta provoca que los hombres tengan celos hacia una mujer con la que ha sido sexualmente activo, y también le hace ser leal.
Conclusión del modelo bioquímico del amor
Las 3 etapas del amor y los sistemas hormonales están conectados.
Así, la testosterona puede iniciar a los dos neurotransmisores del amor mientras un orgasmo puede elevar las hormonas de apego, por lo que no se debiera dormir con alguien con quien que se quiere enamorar.
La falta de oxitocina o receptores de vasopresina en el cerebro podría ser responsable del aumento mundial de los solteros.
La incapacidad de secretar oxitocina y sentir empatía está relacionada con la sociopatía, la psicopatía, el narcisismo, el egoísmo y manipulación general.
A medida que los científicos comprenden la química del amor cada vez más, las drogas para manipular el proceso pudieran estar cerca.
Si existiera una droga para el amor y si esta pudiera realmente ayudar a la vida amorosa de alguien sigue siendo una pregunta abierta.
Mientras tanto concluye la Dra Tausz si todavía alguien está buscando a esa persona especial, existe una guía simple sobre cómo enamorarse:
1. Encuentre un extraño(a) completo(a).
2. Revelen unos a otros detalles íntimos sobre sus vidas durante media hora.
3. Luego, mírense profundamente en los ojos del otro sin hablar durante cuatro minutos.
Suerte en el amor y feliz día de San Valentín
COMENTARIO FINAL
Una opinión final de los autores. Es su entendimiento que la siguiente ecuación representa un mejor modelo matemático para el amor (especialmente si hay uno o más ingenieros involucrados).